Sobre Supernovas y agujeros negros.

Dice un proverbio Árabe: si te detienes por los perros que te ladraran al paso, jamás llegaras al final del camino.

Ha muerto Castro, y es normal, los cubanos de dentro,- en silencio-, y los de fuera no tanto,  manifiestan  la alegría, la histeria, la tristeza, la burla, todas las actitudes, y estados inimaginables, y es normal, están todos sustentados en más de medio siglo de tiranía, de opresión, y encantamiento.

Lo malo de una estrella de masa elevada  en su extinción como supernova, no es que explote, es el agujero negro que genera y que lo absorbe todo, es la gravedad que ejerce sobre todo lo que se le acerca. Así está pasando con Castro, ha muerto y está arrastrando hacia sí, toda la energía de aquellos que hasta ayer lo han combatido, y que hoy, continúan combatiéndolo sin darse cuenta que están atrapados en su gravedad inmunda, de la que deben desprenderse para emplearse en lo verdaderamente urgente y edificante, ayudar a destruir el legado que mantiene esclavos a quienes lo siguen siendo a pesar de la ausencia el amo.

Y eso pasa por explicar a unos, y otros la inviabilidad de aplicarle al régimen, no medicinas  que lo reformen, sino veneno que lo aniquile; para que dejen a un lado todos los proyectos que solo resultaran en la prolongación del castrismo, y se pongan a una en el único proyecto a sostener, la movilización de la sociedad para terminar por la vía del reclamo popular con el régimen; para intentar  tender puentes entre las organizaciones, y concienciarlas que deben ser un reflejo de lo mejor de sus ciudadanos para que logren motivar, catalizar, convencer al protagonista del cambio: el ciudadano cubano.

Como veis, hay mucho por hacer, y más todavía, reconciliémonos con nuestros traumas, con nuestras frustraciones, con nuestros fantasmas que nos arrastran al agujero,  porque el castrismo es la prioridad y no Castro, que ya no es parte de este mundo, ha explosionado e intenta apresarnos en su gravedad inmunda, y eso sería para los que se quedan justificándolo, un  triunfo desde el más allá que los animaría a continuar el régimen oprobioso de su líder.

De Castro, ya lo sabemos todo. Al decir de Virulo, …cuatrero, fullero cicatero embustero, ratero asesino y bribón. Eso, y mucho más hasta el infinito, porque no existen suficientes adjetivos para describirlo.

Pero está muerto, ahora, salvemos Cuba, ocupémonos del castrismo.