Heredero de la vergüenza.

Hoy, tengo vergüenza

De la orfandad de un Pasaporte

De tanto camino... y más caminantes

De una supervivencia perpetua.

Hoy, tengo vergüenza

De un mestizaje inducido e indecente

De Aedes, mierda en las calles, y baches traicioneros

De la mansedumbre del caballo, de la bestialidad de los hombres.

Tengo vergüenza de un Peso sin peso

Del mercantilismo de Céspedes, y la hipocresía de Guevara

De mulatas tristes con culos perdidos

De símbolos sin virtud, y sin sentido.

Hoy, tengo vergüenza

De paisanos de gafas empañadas, y optometristas mediocres

De aseres, colegas, y hermanos sin causa

De un barco de ratas sin iceberg redentor.

De Toscos, picadillos de soja,  maniseros perdidos

De ruedas de oropel, y alegrías huecas

De la superchería de un Babalú borracho, y  un vicioso Changó

De una fe sin aché, de flautistas fulleros y ovejas sin remedio.

Vergüenza sí, de redes rotas... y amigos duplicados

De estériles hemorragias académicas, en universidades sin nombre

De educandos sin educación, de vestales sin templo

De un futuro secuestrado, y un pasado... que abochorna.

Hoy, tengo vergüenza de todos

De Hatuey

De Carlos

De Antonio

José

Hoy, tengo vergüenza... de mí.